Formación de avalanchas

22.03.2018

Definición avalancha de nieve: son grandes masas de nieve o hielo, que se mueven rápidamente ladera abajo de una montaña, producto de la pérdida de estabilidad en las capas de nieve.

Las avalanchas se forman cuando existen precipitaciones de nieve y en algunos casos, existe viento que transporta la nieve, hacia las zonas de partida de las avalanchas, y para ello debe existir una inclinación de la ladera, entre 25º y 55º; las avalanchas presentan características muy variadas porque no existe exclusivamente un tipo de avalancha, sino diferentes avalanchas, según su tamaño, se clasifican en 1 a 5 (Sistema Canadiense) según su longitud y van desde los 10 m hasta los 3.000 m. aprox., asociadas a una presión de impacto que van desde 1 kPa a 1000 kPa aprox.; y según clasificación internacional. (Atlas Avalanchas, Unesco 1981) según su forma, estas avalanchas tienen una zona de inicio o salida, donde la nieve inestable empieza a moverse, zona de trayecto o recorrido, y la zona de depósito o llegada, es donde esta pierde velocidad, acumula y finalmente se detiene la avalancha, según el movimiento se clasifican en avalanchas de nieve polvo o avalancha de fusión, según su flujo, se clasifican en Avalancha de Flujo denso, Flujo Mixto y Aerosol, y también según las distintas causas de su inicio.   Las avalanchas de flujo denso: como su nombre lo dice poseen una mayor densidad en su flujo, una avalancha de flujo denso, posee un densidad inicial ( 200-300kg./m3), la cual al término del deslizamiento montaña abajo aumenta en forma considerable, debido al proceso de fricción, dinámica de movimiento y sus procesos internos del flujo; la avalancha de  aerosol: Es una nube de nieve formada por aire y partículas de nieve en suspensión, compuesta por nieve fresca, seca y de baja densidad. Esta avalancha desarrolla grandes torbellinos que pueden tener varias decenas de metros de altura que descienden a más de 300 km por hora, sin dejarse canalizar por el relieve, atravesando el valle y remontando las vertientes opuestas en algunos casos. El efecto destructivo de esta avalancha es debido al soplo del aerosol, esta onda expansiva precede a la luz y puede causar daños en bosques y/o infraestructuras, y a las personas, son altamente destructivas.

Las avalanchas se encuentran en la categoría de riesgos naturales previsibles, por lo tanto, los riesgos de avalanchas pueden ser previstos a través de un estudio de ingeniería en riesgos de avalanchas, mediante el estudio de la dinámica de las avalanchas, y una vez identificados los riesgos y su magnitud, se pueden proteger todas las zonas y/o instalaciones consideradas como potencialmente peligrosas, además es posible determinar su prioridad, su vulnerabilidad hacia las personas, vehículos, instalaciones industriales o áreas de trabajo, caminos, etc., entonces es posible determinar las soluciones de las protecciones adecuadas para la infraestructura que se requiere proteger y al escenario invernal respectivo.